domingo, 15 de septiembre de 2024

Palabras bajo libertad (V)

 


¿Palabras?

Sí, de aire,

y en el aire perdidas.

Octavio Paz

 

Selección y edición: Manuel Cabesa

 

Reimar Arcia (12-09-1999) es una joven estudiante de agronomía. Sin embargo, sus aptitudes se han decantado hacía el quehacer artístico: fotógrafa, publicista dedicada al marketing además de la promoción de productos... Modelo de sus propias campañas publicitarias...

Desde muy temprano estuvo inclinada hacia la lectura, desde la adolescencia, también, tuvo inquietud por la poesía.

Aunque, hasta el momento, no ha participado de ningún taller literario esa inquietud se ha volcado en sus palabras y la poesía ha sido receptáculo de ella.

Ha participado en lecturas en el Centro Cultural Higuaraya Capanaparo, la Facultad de Agronomía de la UCV y en el 17° Festival Mundial de Poesía/Aragua, 2023.

A continuación compartimos tres de sus poemas...

 

***

Poemas de Reimar Arcia

 


El caminante

 

Voy deambulando

por las calles frías

en plena oscuridad.

 

Sin ningún tipo de compañía.

 

De esquina en esquina.

 

Sé que a pesar del esfuerzo

no habrá nadie.

 

Nadie quien me espere,

ni me acompañe,

ni me necesite,

ni me  comprenda.

 

Todos ocupados.

 

En sus objetivos,

asuntos, metas,

compromisos

y mentiras.

 

Y yo sigo aún aquí.

 

Aquí, caminando.

 

Esperándote afuera,

en la calle.

 

Bajo la lluvia.

 

***

 

¿Por qué eres así conmigo?

 

Acaso,

¿no te has dado cuenta

en lo que me has convertido?

 

Adueñándote 

de mis pensamientos

y emociones.

 

Arrastrándome

hasta la mínima hoguera

y no poder respirar.

 

Intento ignorarte,

pero eres consistente,

me desnudas,

me quitas el aliento,

me robas el valor,

el coraje y mis fuerzas.

 

Mis muslos se contraen,

mis manos sudan,

y mi garganta se seca.

 

Ya no puedo más,

haces que me pierda.

 

Eres como las olas del mar,

vas y vienes,

pero jamás te quedas.

 

Ansiedad.

 

***

 

 

Las puertas cerradas

se abren,

las espinas se convierten en jardín,

las heridas se curan,

las flores pierden su color,

pero jamás su aroma.

 

Todo se va sanando,

todo se supera,

poco a poco lo olvidas.

 

Te vas llenando de valor.

"No necesito a nadie",

te repites,

"Me tengo a mí".

 

Me pinto los labios,

me seco las lágrimas,

me aplico perfume...

 

...y salgo a la calle,

a coquetear con el mundo.

2 comentarios:

  1. Hola 😊. Muchas gracias por la oportunidad☺️☺️☺️, ¡les mando un beso y un abrazo desde la distancia!

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Los blogs se alimentan de palabras, gracias por dejar sus comentarios en el mío.
Un abrazo,
Rafael Ortega